¿Qué se entiende por higiene vocal?
Entenderemos por higiene vocal todos aquellos procedimientos dirigidos a permitir el autocuidado de la voz, especialmente en aquellas personas que hacen un uso profesional de la misma. Para llevar a cabo una adecuada higiene vocal es necesario tener en cuenta una serie de precauciones para evitar la irritación y desgaste inútil de las cuerdas vocales, aún en situaciones en que no se haga uso de la voz.
Distintas situaciones de mal cuidado de la voz
Una de las situaciones más características que merecen una adecuada higiene vocal la constituye la hiperfunción vocal o laríngea (gritar, hablar a alta intensidades, etc.). La hiperfunción laríngea asociada a un abuso o mal uso vocal da por resultado típico alteraciones patológicas laríngeas (por ej.: laringitis crónicas, nódulos y pólipos vocales y úlceras de contacto), generalmente de tipo reversibles, cuando cesa la hiperfunción laríngea. El mal uso de la voz, sugiere una conducta de producción vocal que distorsiona la propensión normal del mecanismo fonatorio para trabajar efectiva y eficientemente.
Eficiencia fonatoria
Un sistema eficiente, produce sus mejores resultados con un mínimo de esfuerzo. Así, un sistema fonatorio con componentes individuales sanos, coordinado e interactuando con todos los sistemas de apoyo, produce la voz en forma eficiente. Existe un número de formas en las cuales la suave operación de la voz puede ser alterada. La intervención en voz debe, pues, incorporar programas que ayuden al paciente a identificar y eliminar estas actividades vocales, caracterizadas por la hiperfunción laríngea. Por lo tanto, se hace necesario abordar en las personas con hiperfunción vocal, procedimientos destinados a desarrollar el autocuidado vocal, es decir, a favorecer la higiene vocal.
Malos hábitos
Otra de las situaciones características que desfavorecen la higiene vocal, la constituyen algunos hábitos de ingesta de productos irritantes y secantes de la mucosa laríngea, tales como los condimentos, las bebidas alcohólicas, alimentos muy calientes o muy fríos, el hábito de fumar, cambios bruscos de temperatura, gritar al aire libre, entre otros.
Por otra parte, es recomendable observar las situaciones de agotamiento nervioso, la falta de sueño, el descontrol emotivo, la vida agitada y el estrés, puesto que todas estas situaciones pueden redundar finalmente en malos hábitos vocales, un mal cuidado vocal y, por lo tanto, una inadecuada higiene vocal.
Un requisito vital, tanto para una buena medida preventiva como para una adecuada rehabilitación vocal en pacientes afectados de abuso o mal uso vocal, es un programa de higiene vocal. El primer objetivo de este programa es ante todo, identificar y luego eliminar los factores causantes del abuso o mal uso vocal.
MEDIDAS DE HIGIENE VOCAL
Hábitos de higiene vocal
– Limitar la cantidad de tiempo de habla. Hable lo justo y necesario, sobretodo si siente que su voz se cansa con facilidad.
– No forzar la voz en situaciones de mucho ruido ambiental.
– Evitar gritos e imitación de sonidos onomatopéyicos.
– Cuídese de los cuadros catarrales y el reflujo gastroesofágico. El reflujo puede dañar gravemente su laringe y afectar la producción de la voz.
– Evite hablar de manera prolongada a larga distancia y en el exterior.
– No cante más allá de la gama en que se encuentre cómodo.
– Evitar toser o aclarar la voz (carraspear) excesivamente. Este acto puede dañar los pliegues vocales, en lugar de ello tomar agua.
– No hable mucho durante un ejercicio físico agotador.
– Evite comidas picantes (Ajo, mostaza, pimienta, etc.) sobretodo si tiene reflujo gastroesofágico.
– Realice reposo vocal después de una jornada de gran uso de su voz
– Haga ejercicio con regularidad.
– Realice una dieta equilibrada.
– Mantenga una postura corporal adecuada mientras hace uso de su voz. Posturas inadecuadas producen compensaciones musculares que pueden afectar a la zona cervical y laríngea.
– No ponga en tensión la parte alta de su tórax.
– No apriete los dientes ni tense la mandíbula o la lengua.
– No fumar (fumar es uno de los factores principales en la formación de cáncer laríngeo, además irrita las cuerdas vocales y las reseca)
– Ritmo regular y estable de sueño.
– No usar anestésicos locales, ni aspirina previo a actuación.
– Vocalice previo a la actuación, no cante ni hable «en frio». Realizar ejercicios de calentamiento vocal antes de cantar o de hablar.
– Evite ambientes muy secos, con excesiva calefacción o aire acondicionado. Esto disminuye la hidratación de las cuerdas vocales.
– Tomar al menos 2 litros de agua por día (entre 8 y 10 vasos por día). Los pliegues vocales necesitan estar lubricados con una capa delgada de moco para poder vibrar eficientemente. La mejor lubricación puede lograrse tomando bastante agua.
– Evitar hablar demasiado rápido.
– Evitar reír a carcajadas.
– No cantar sobre grabaciones de cantantes. Hacer esto tiende a hacer que imitemos la forma de emitir de otros cantantes.
– Evitar tomar alcohol ni café ya que el alcohol y la cafeína deshidratan las cuerdas vocales.
– Evitar hablar demasiado fuerte ya que puede traumatizar las cuerdas vocales. En el caso de tener que utilizar la voz hablada con niveles altos de intensidad realizar entrenamiento logopédico.
– No susurrar. Provoca tensión en la laringe.
– Ante el menor síntoma de cambio de su calidad vocal (EJ: voz opaca, pérdida de notas agudas y/o graves, quiebres de voz, problemas con el vibrato, aparición de ruido en la emisión, pérdida de volumen, cansancio vocal, dolor, irritación, etc) consultar inmediatamente a un O.R.L.
– No imitar voces, esto puede producir hiperfunción o hipofunción y posteriormente lesión orgánica en las cuerdas vocales. Si se debe imitar voces profesionalmente como por ejemplo en doblajes realizar entrenamiento vocal.
– Evitar áreas polvorientas y con mucho humo. Esto irrita y deshidrata sus cuerdas vocales
– Evitar estados de nerviosismo. La voz está directamente relacionada con las emociones.
– No utilizar descongestionantes, antihistamínicos o fármacos no prescriptos por el médico. Algunos medicamentos pueden producir deshidratación en las cuerdas vocales.
– Si utiliza su voz en el trabajo o en otras actividades realizar entrenamiento con logopeda.
– Ante una disfonía de más de una semana de duración consulte inmediatamente al O.R.L.
– Evite temperaturas extremas: aire muy frío ó muy caliente. Utilice un humedificador en las noches.
– Si habla ante un auditorio grande utilice un micrófono, hable despacio y articulando bien las palabras.
– Las mujeres deben limitar en lo posible el uso de la voz antes y durante su ciclo menstrual.
– Evite los químicos, pinturas y artículos de limpieza. Si debe usarlos colóquese una mascarilla que cubra la nariz y la boca.
– Si necesita llamarle la atención a alguien, use sonidos no vocales tales como aplaudir, campanas, chiflar.
– Acérquese más hacia la persona con quien está hablando.
– Mire cara a cara hacia la persona(s) con quien está hablando.
– Control periódico con profesional idóneo ante dificultades de voz. (ORL, logopeda)